Uno nunca espera
las sorpresas de la vida
ni las cosas mala
ni las cosas buenas
Ni los reencuentros
uno puede preveer
Pero todo hay que tomárselo
tranquilo y con la frente en alto
Por eso hoy
estoy contento de hablar
después de tanto años
sin hablar contigo
como si vinieras del pasado
Y no tengo miedo de decirte
que lamento lo mal que hice
que a pesar de todo
aprendí de ti algo valioso
que lo que pasó
fue una lección
Y espero que esta sorpresa
este reencuentro
por el medio más extraño
sea augurio de buenas nuevas
porque siempre estás
en las plegarias que alzo
porque te recuerdo
con cariño inmenso
y me alegra saber de ti
Porque te deseo lo mejor
y me alegra volver
a compartir unas palabras
aun por este espacio virtual
Uno nunca espera
las sorpresas de la vida
Esta fue una buena
y me alegro de haberla recibido
martes, 10 de noviembre de 2009
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